Como a muchas personas en el mundo, a mí la matemática y los números, siempre me parecieron muy complicados, tanto para enseñar, como para aprender y la verdad, siempre huí de ellos, hasta que conocí Singapore Math.
Singapore Math, es un método de enseñanza de la matemática, originado en Singapur y utilizado en la educación matemática de niños desde el primer año de pre primaria, hasta el último grado de educación secundaria. Este método, más que simplemente enseñar números y operaciones aritméticas, busca familiarizar al niño con los números en sí y para ello, se basa en la relación que existe entre los números y su valor, comenzando desde lo más simple. Se basa en la utilización de operaciones mentales y el uso de ejemplos físicos con material manipulativo, que una vez dominado por el niño, da paso al manejo de material ilustrativo o pictórico, por medio del cual se refuerzan los conceptos aprendidos que facilitaran el aprendizaje de las operaciones con números o abstractos. De ahí, que lo primero que aprenda un niño en Singapore Math, sea que un número, es mucho más que un simple número y que cada uno de ellos, tienen su propio valor, ya que un 1 sumado a un 2, da como resultado un 3 y ese 3 sumado a un 7 dará como resultado un 10.
Por medio del uso de material manipulativo, los niños aprenden no solo, que sumar 1+2 es igual a 3 y que 3+7 es igual a 10, sino que cada uno de esos números, por si solos tienen un valor. De igual forma, Singapore Math enseña al niño a reconocer el valor de cada número, dependiendo del lugar que ocupe en su formación, por ejemplo: en 245, el dos no tiene el mismo valor que en 25, pero el cinco sí. Los niños se familiarizan tanto con los números, con su valor y con el valor que tienen dependiendo de la posición que ocupan, que simplemente aprenden a simplificarlos hasta su más mínima parte, para poder operarlos.
En cuanto a la resolución de problemas matemáticos, que tantas veces se me dificulto en mis años escolares, Singapore Math ofrece un método llamado Model Drawing, en el que los niños aprenden a utilizar gráficas de bloques para representar las cantidades con las que deben trabajar, que facilitan no solo el entendimiento del problema, sino también la forma en el que este debe trabajarse. Es mucho más sencillo sumar, restar, multiplicar o dividir bloques, que trabajar solamente con números y letras, sin poder visualizar realmente, lo que debemos efectuar. Es por esto que la matemática se hace mucho más entendible fácil y amigable. Si tan solo hubiera conocido este método antes!!!