Seleccionar página

consejos-de-fundacion-leer

“El mejor regalo de un padre a sus hijos, es un poco de su tiempo cada día”. Leon Battista Alberti.

¡Y vaya si no es importante el tiempo que los padres comparten con sus hijos!  Pues de ello depende la relación que establezcan y que marcará el desarrollo pleno de su personalidad. Madre y padre, influyen de igual manera en ese desarrollo y aunque en el pasado se consideró, que era la madre quien en su papel de cuidadora establecía un vínculo más fuerte y de mayor influencia en el desarrollo de sus hijos, estudios recientes confirman, que el vínculo que se forma entre un padre y sus hijas e hijos, es tan fuerte como el de la madre y su influencia, igual de importante en el pleno desarrollo personal de los niños.

family-playing-video-game

La vida moderna y su característico estilo de vida, ha sido en parte responsable de estos cambios y en la actualidad,  muchas madres trabajan también fuera del hogar, por lo que tanto ellas como la misma sociedad, esperan que los padres se involucren más en el cuidado, educación y crianza de los hijos. Claro está, que cada uno lo hará desde su propio rol de madre o padre, por lo que la madre siempre será quien cuide, calme y conforte a los niños y el padre, quien como compañero de juegos, permitirá a sus hijos explorar, probar y conocer los patrones de vida. Lo que sí debe establecerse en común, son las pautas de crianza, tanto la madre como el padre, deben ponerse de acuerdo en la forma en que criaran a sus hijos y como nadie nace sabiendo, he aquí algunas recomendaciones generales:

  1. Dedica tiempo a tus hijos: Haz un alto en tu día a día y permítete pasar tiempo con ellos, de esta forma podrás conocerlos y sabrás cuáles son sus fortalezas y debilidades, sus intereses, temores, aficiones y cualidades.
  2. Ámalos como son: Los niños que se saben amados y aceptados por sus padres, se sienten más seguros y desarrollan una mejor autoestima, que los que no se sienten así.
  3. Disciplínalos con amor: Pon reglas de comportamiento claras, justas y razonables, no las cambies, se firme en ellas, de esta forma no perderás credibilidad ante tus hijos y al aprender a seguirlas, se formara un hábito en ellos.
  4. Háblales siempre de forma positiva: Tus hijos responderán mejor si resaltas sus virtudes más que sus errores y de esta forma, desarrollarán una personalidad sana. No olvides que los gestos de cariño, caricias y abrazos, nunca estarán de más.
  5. No los sobre protejas: Déjalos aprender que toda acción tiene sus consecuencias y que las decisiones que tomen, siempre tendrán un impacto positivo o negativo en sus vidas.

En cuanto a la educación escolar, el hecho de que tus hijos asistan al colegio, no quiere decir que su aprendizaje dependa solamente del maestro, madre y padre son también responsables de eso, por ello es importante:

  1. Establecer un ambiente de confianza, en el que tus hijos sepan que pueden acercarse a hablarte sobre cualquier tema que les cause inquietud, háblales siempre con la verdad y utiliza un lenguaje propio para su edad.
  2. Asigna un espacio de trabajo en casa, en donde tus hijos puedan hacer sus tareas con comodidad y tranquilidad, manteniendo siempre un orden y horario establecido.
  3. Procura mantenerte en contacto con los profesores de tus hijos y apóyalos en lo que te sea posible, consultas en internet, búsqueda de material, etc.

Y sobre todo, se congruente en lo que les enseñas y haces, recuerda que la acción habla más que las palabras y que eres su ejemplo a seguir.

Share This