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Es de conocimiento general los beneficios físicos que el practicar un deporte aportan, sin embargo, los beneficios van más allá de un cuerpo sano y la prevención de enfermedades cardíacas, respiratorias, entre otras. El practicar un deporte proporciona beneficios para la salud mental y emocional, mejora las habilidades sociales, las habilidades cognitivas y el rendimiento académico; en general mejora la calidad de vida de las personas que lo practican regularmente.

  • Algunos de estos beneficios son:
    • Reduce la ansiedad, disminuye la depresión moderada, proporcionando una mejora al bienestar emocional. Ayudar a tener una mayor estabilidad emocional, regula emociones e impulsos.
    • Aumenta la autoestima y fortalece la autoconfianza y la seguridad en sí mismo.
    • Fortalece la capacidad de trabajar en equipo fomentando la colaboración y disminuyendo el individualismo. Esto también mejora las habilidades sociales y ayuda a superar la timidez.
    • Proporciona una mayor estabilidad emocional, ayuda a regular emociones e impulsos y a manejar la ansiedad y posibles frustraciones.
    • Fortalece la capacidad de seguir reglas y la creación de nuevos hábitos.
    • Crea una mayor independencia.
    • Mejora la memoria y la concentración.
    • Mejora el funcionamiento intelectual.

Los beneficios emocionales y cognitivos al practicar un deporte tienen origen en el cerebro. Estudios demuestran que cuando practicamos un deporte o hacemos una actividad física intensa, nuestro cerebro lo percibe como una situación de estrés por lo que empieza a liberar sustancias químicas para contrarrestar o disminuir los efectos negativos que éste estrés pudiera generar. Una de las sustancias liberadas más importantes es una proteína llama Factor neurotrófico derivado del cerebro más conocido como BDNF por sus siglas en inglés. Esta proteína, como su nombre lo indica, pertenece a la familia de factores neurotróficos, que están formados por el factor de crecimiento nervioso (NFG) y su función principal consiste en enviar señales para incrementar la resistencia al daño y la degeneración de las neuronas, promover el crecimiento, la funcionalidad y la supervivencia neuronal.

A muchos de nosotros se nos ha dicho que nacemos con cierta cantidad de neuronas y que poco a poco las vamos perdiendo y ya no podremos generar nuevas neuronas, sin embargo existen partes del cerebro adulto, especialmente el hipocampo, que son capaces de sintetizar o generar nuevas neuronas en un proceso llamado neurogénesis. La neurogénesis ocurre cuando nuestro cerebro produce BDNF, promoviendo el desarrollo del cerebro, realzando la habilidad de crear nuevas conexiones sinápticas, permitiéndonos crear nuevos hábitos, ser más flexibles en nuestro pensamiento, disminuye el proceso de envejecimiento cerebral, forma nuevas neuronas y nos ayuda a fortalecer nuestra memoria a largo plazo, por lo que el BDNF juega un papel muy importante en la plasticidad cerebral (capacidad del cerebro para cambiar y remodelar conexiones sinápticas) lo que lo hace estar estrechamente ligado al aprendizaje y al mejoramiento de las habilidades cognitivas.

También hemos escuchado en varias ocasiones que el hacer ejercicio libera endorfinas y esto produce felicidad. Si bien es cierto, las endorfinas minimizan la incomodidad que el ejercicio pudiera producir, bloquean la sensación de dolor y nos produce un estado de bienestar y euforia, sin embargo no son las únicas sustancias implicadas en este proceso. Como sabemos, las neuronas se comunican entre ellas y lo hacen a través de mensajeros químicos llamados neurotransmisores. La dopamina y la serotonina son unos de los neurotransmisores más importantes para la comunicación entre neuronas y están altamente relacionados con aspectos determinantes para la salud mental como lo es el estado de ánimo. La dopamina específicamente está relacionada con sensaciones de gratificación y emociones como la alegría y con los procesos de motivación. La serotonina funciona a nivel de varias estructuras cerebrales como lo son el hipotálamo, la amígdala, el hipocampo y el núcleo accumbens, relacionados con el control de la expresión emocional, la creación y almacenamiento de recuerdos en base a hechos emocionales, memoria y conductas agresivas y expresión emocional respectivamente. El funcionamiento adecuado de estas estructuras está relacionado con la serotonina.

Como podemos ver, el realizar un deporte o realizar ejercicio físico repetidamente, específicamente de tipo aeróbico, nos proporcionará una mejor salud a nivel cerebral, promoviendo el aprendizaje, la memoria y otras habilidades cognitivas al aumentar los niveles de BDNF y nos ayudará a tener una mejor salud emocional y mental por medio de la liberación de endorfinas y neurotransmisores como la dopamina y la serotonina proveyendo una sensación de bienestar general y previniendo trastornos mentales y emocionales.

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